La Sociedad Civil Saharaui advierte a la Comisión Europea de sus maniobras en incluir las aguas del Sahara Occidental en los acuerdos de pesca con Marruecos, para estas organizaciones, la Comisión Europea quiere ignorar o eludir una sentencia del TJUE.
Cientos de organizaciones de la sociedad civil saharaui expresaron el sábado 3 de febrero su "profunda preocupación" en las negociaciones entre la UE y Marruecos para incluir productos del Sáhara Occidental ocupado en sus acuerdos comerciales sin el consentimiento del pueblo saharaui, condenando un enfoque "destructivo e insostenible" de la Comisión Europea hacia el conflicto del Sahara Occidental.
"Expresamos nuestra profunda preocupación por las negociaciones en curso entre Marruecos y la Comisión Europea para incluir al Sáhara Occidental en los acuerdos comerciales con Marruecos sin el consentimiento del pueblo saharaui a través de su representante legítimo, el Frente Polisario", advirtieron estas organizaciones, desde los territorios ocupados, los territorios liberados, los campos de refugiados en Tinduf y la diáspora, en una carta a la Comisión Europea.
Las mismas organizaciones también expresaron "serias reservas" sobre la actitud de la Comisión Europea, diciendo que el deseo persistente de la Comisión Europea de ignorar o eludir una sentencia de su tribunal supremo "socava los derechos fundamentales del pueblo saharaui y permite la continuación de la explotación ilegal de los recursos naturales del Sáhara Occidental". Subrayan que hasta la fecha, "no se ha autorizado ninguna revisión seria de este proceso (de negociaciones)", el mandato dado por el Consejo de la UE a la Comisión Europea en mayo pasado para negociar con Marruecos una modificación del texto del acuerdo para la liberalización de los productos agrícolas que se mantiene en secreto.
Lamentando que el ejecutivo europeo no haya intentado vincularse con el Frente Polisario como representante legítimo del pueblo saharaui, las organizaciones saharauis recuerdan que el TJUE, sin embargo, ha dictaminado que ningún tratado comercial entre Marruecos y la UE puede aplicar legalmente al Sáhara Occidental a menos que la gente del Sahara Occidental dé su consentimiento. “El TJUE, en diciembre de 2016, decretó definitivamente que Marruecos no tiene soberanía sobre el Sáhara Occidental, reafirmando la posición de la Corte Internacional de Justicia, las Naciones Unidas y la Unión Africana.
También ha afirmado que el Sáhara Occidental es un territorio no autónomo, que el pueblo del Sáhara Occidental es el propietario exclusivo de los recursos naturales del territorio, y que cualquier acuerdo sobre los recursos naturales del Sáhara Occidental requiere el consentimiento de los representantes del pueblo saharaui". Recordó la carta.
Las organizaciones de la sociedad civil saharaui han recordado que la Resolución 34/37 de la Asamblea General de las Naciones Unidas ha establecido que el Frente Polisario es el representante legítimo del pueblo del Sáhara Occidental. "Como señaló el Abogado General del Tribunal de Justicia el 10 de enero de 2018, el territorio está bajo ocupación parcial de Marruecos y el derecho internacional humanitario se aplica a él", agregó la carta. Denunciando la opacidad de las negociaciones entre la UE y Marruecos, las organizaciones de la sociedad civil saharaui lamentaron el enfoque de la Comisión Europea que "ahora busca iniciar un proceso de consulta tras la conclusión de un acuerdo negociado con Marruecos".
Según estas organizaciones, "muchos grupos (saharauis) han recibido una invitación de la Comisión Europea para asistir a una reunión de consulta en Rabat", expresando que es "profundamente preocupante" que la UE esté organizando una consulta con los saharauis en el país ocupante sin ninguna garantía que Marruecos no ejercería ninguna influencia sobre las partes participantes, incluso mediante la intimidación y la amenaza de represalias". Además, estas consultas, continuó la advertencia saharaui, "no ha tenido en cuenta a los saharauis que viven en las partes liberadas del territorio (Sahara Occidental, bajo el Gobierno de la República Saharaui) o en los campos de refugiados".
Para las organizaciones de la sociedad civil saharaui, el enfoque de la Comisión Europea es "profundamente destructivo e insostenible" y "contraviene directamente el derecho europeo e internacional". Este enfoque "refuerza y financia la ocupación ilegal de Marruecos y amenaza con socavar el proceso político de la ONU y los esfuerzos del Enviado Personal del Secretario General de las Naciones Unidas para el Sáhara Occidental", agregó la carta de la sociedad civila saharaui, alegando su negativa a participar en el actual proceso de consulta organizado por la Comisión Europea, que depende de Marruecos y las entidades que apoyan la ocupación del Sáhara Occidental.
Estas organizaciones condicionan su participación en este proceso a la organización de una consulta "legítima, abierta y creíble" que garantice "la seguridad de los participantes para poder hablar libremente" y un "compromiso de la UE de actuar de buena fe para encontrar una solución legal y justa a la ocupación del Sahara Occidental". También pidieron a la Comisión Europea que no confunda los términos "poblaciones saharauis".
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