Mohamed Moulud Yeslem presentó ayer mañana en Madrid su proyecto artístico “Por cada mina una flor”, en la sala Off Limits. Con un documental grabado recientemente en los campamentos de refugiados saharauis de Tindouf (Argelia) y acompañado por 3.000 flores de papel realizadas por voluntarios y niños de la localidad barcelonesa de Gava, pretende hacer una de reivindicación social-político-humanitaria y, también artística, para la destrucción del muro marroquí en el Sáhara Occidental, un grandísimo desconocido de 2.700 km que divide el territorio y al pueblo saharaui en dos, sembrado, además, a ambos costados por 10 millones de minas terrestres, bombas de racimo y otros artefactos explosivos marroquíes, que causan miles de víctimas y numerosos daños e impactos a la sociedad saharaui. El acto ha contado con la presencia de Abdullah Arabi, Delegado saharaui en Madrid; Gerard Baena (en representación del ayuntamiento de Gavá ); Pepe Taboada, Presidente de CEAS; Gaici Ahmed Nah, representante de la Asociación Saharaui de Víctimas de las Minas – ASAVIM; y Mohamed Moulud Yeslem, artista y creador del proyecto. También asistieron poetas y escritores saharauis, miembros de las asociaciones de amistad con el pueblo saharaui en Madrid, así como, miembros de la Plataforma Gritos Contra el Muro Marroquí.
Con el apoyo del Ayuntamiento de Gava y varias entidades de la misma localidad, como la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui, el Bando de Tiempo, la Asociación de Discapacitados, Urban Kniting y los colegios de la ciudad, Mohamed Moulud Yeslem impulsó una acción solidaria para que en el Día de Sant Jordi los voluntarios entregasen flores de papel, en su mayoría firmadas por los propios niños y niñas que las hicieron en sus respectivas escuelas.
El proyecto “Por cada mina una flor” tiene el objetivo de sensibilizar sobre los problemas que crea este muro para la población saharaui y para los animales en el Sahara Occidental, a través de la recolección de 10 millones de flores de todas aquellas personas interesadas en el proyecto y que deseen apoyarlo. Tras la recogida, estas flores se sembrarán ante el mismo muro marroquí en el Sáhara Occidental, conocido como muro de la vergüenza. Las flores se harán de tela o de plástico, además, todos los invitados y visitantes deberán traer una flor y donarla al proyecto. También se les pedirá a los interesados que apadrinen sus propias flores, o bien, que les busquen padrinos.
Fuente: Rasd News
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