¿Se decidirá el futuro del Sahara Occidental en el 2015?

“la libertad cuesta muy cara, y es necesario, o resignarse a vivir sin ella, o decidirse a comprarla por su precio”. José Martí.

La cruenta guerra entre los saharauis representados por su legítimo representante, el Frente Polisario y el invasor Reino Alauí, termina con el acuerdo de alto el fuego, año 1991. La ONU, crea la MINURSO para la celebración de un referéndum en el Sahara Occidental (Territorio No Autónomo), que a fecha de hoy no llega.

En abril pasado, a las prestigiosas ONGs, (HRW., AI., RFK. Center, etc.),  se suma  el Secretario General de la ONU en su petición por la creación de un mecanismo que vigile los Derechos Humanos en el Sahara Occidental. Este, en su último informe (2014/258) (1) va más allá, fijando como fecha límite abril del 2015, en caso de persistir el  statu quo actual, el enfoque del conflicto cambiaría por completo. Marruecos se libra un año más, gracias al mal llamado “Grupo de Amigos del Sahara”, en especial Francia y España, pero su nerviosismo es patente.

Marruecos explota ilegalmente al 100% los recursos naturales saharauis, sin beneficio para la población saharaui (ver informe Hans Correl) (2), y toda manifestación pacífica es reprimida por la fuerza. La juventud saharaui cansada de tanto esperar y sin futuro está a un paso de la radicalización.

El 20 de mayo de 1973, el Frente Polisario ejecuta su primera acción militar, 41 años después las miradas convergen en la próxima conmemoración de esta acción, con la vista puesta en abril del 2015. ¿Sera un punto de inflexión en la resolución del conflicto?. Es difícil hacer un pronóstico certero, pero no cabe la menor duda, de que, si la dirección del Frente Polisario está decidida a cambiar  de estrategia, un buen momento para demostrar su poderío militar, y dar un mensaje claro y contundente que están dispuesto a empuñar las armas en caso de no avance, es la próxima conmemoración del 20 de mayo. Los mensajes deben ir acompañados de acciones inequívocas a lo largo de todo el año, hasta la hora cero (abril de 2015).

Solo el equilibrio entre la política y el poderío militar hace avanzar la negociación, los saharauis después del alto el fuego (1991) confiaron su suerte totalmente a la política, descuidando la vertiente militar, esto hizo que el conflicto se estancara 23 años, en beneficio del invasor.

Por otra parte, en caso de una eventual guerra, Marruecos no está en situación política, ni económica, ni social para afrontarla (ver) (3), y las consecuencias son de dimensiones impredecibles para la zona del Magreb y el Sahel  (la frágil situación de Mali, los Tuareg insatisfechos, el armamento libio en abundancia en el mercado negro, la desastrosa situación de Libia, la frágil situación tunecina, Al Queda campa a sus anchas, etc.).

La decisión está en manos de los líderes saharauis, los saharauis tienen mucho que ganar  y  poco que perder.

(1)    http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=S/2014/258
(2)    http://www.nodo50.org/csca/na/na47/documento-sahara.pdf
(3)    https://www.facebook.com/notes/mahayub-labaihat/nueva-oportunidad-para-que-el-pueblo-saharaui-decida-su-destino/274764856038878?notif_t=notify_me

Mahayub Labaihat

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