El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha trasladado este compromiso al jefe de la diplomacia marroquí, Saadedín al Otmani, durante su primera visita a España, en la que también ha sido recibido por el Rey en el Palacio de la Zarzuela.
En una comparecencia conjunta ante los medios en el Palacio de Viana al término de su estancia en Madrid, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha garantizado a Otmani que España se volcará para que Marruecos tenga un mejor reconocimiento en la UE. García-Margallo ha apoyado por un lado que el reino alauí disponga de fondos europeos y también que pase a tener un "estatuto avanzado plus", que supondría un escalón más respecto al que se le concedió en octubre de 2008 para estrechar la cooperación política y económica.
La UE debe aprobar este año el paquete de fondos estructurales y de cohesión para el período 2014-2020, aunque García-Margallo se ha mostrado partidario de que Marruecos y otros países del norte de África dispongan de ellos cuanto antes con el fin de consolidar sus reformas democráticas en marcha.
A partir de 2014, está previsto que España deje de percibir ayudas europeas y pase a ser contribuyente neto, aunque el Gobierno del PP quiere que la pérdida de fondos sea gradual, lo que rechazan países como Alemania, Francia y Reino Unido.
García-Margallo se ha felicitado de la decisión de la UE de volver a negociar un acuerdo pesquero con Rabat, después de que el Parlamento Europeo lo bloqueara el pasado mes de diciembre.
Queda pendiente la renovación del convenio agrícola, que Otmani ha considerado prioritario para su país, en contraposición al malestar generado en el sector hortofrutícola español por el aumento de las exportaciones marroquíes.
Como ya hiciera Rajoy en su visita al reino alauí el pasado 17 de enero, García-Margallo ha destacado la "magnífica" relación bilateral y ha puesto a Marruecos como ejemplo para otros países árabes por su decidida apuesta democrática.
Tanto García-Margallo como Otmani han dejado a un lado las tradicionales discrepancias entre ambos países, como la de Ceuta y Melilla.
"Es mucho más lo que nos une que lo que nos diferencia", ha dicho el jefe de la diplomacia marroquí, miembro también del partido islamista que encabeza el nuevo Gobierno de Abdelilah Benkirán.
El ministro español sí se ha referido al contencioso del Sáhara Occidental para recordar que España desea "una solución justa, duradera y mutuamente aceptable" entre Marruecos y el Polisario que "prevea la libre autodeterminación del pueblo saharaui", de acuerdo con las resoluciones de la ONU.
No obstante, no ha precisado si apoya el referéndum que reclaman los saharauis.
"No corresponde al Gobierno español decir de qué forma las partes entienden que se debe ejercer el derecho de autodeterminación", ha explicado.
"Esto quiere decir que cualquier solución debe ser aceptada y negociada entre ambas partes", ha añadido.
En la reunión entre ambos ministros, con la que Otmani ha cerrado su estancia en Madrid, se ha hecho un repaso detallado de las áreas donde se pretende reforzar la colaboración, como la lucha contra el narcotráfico, la inmigración ileal y el terrorismo.
García-Margallo ha anunciado que el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, viajará a Marruecos en próximas fechas para abordar esta cooperación, en especial, en lo que respecta al control de las avionetas que cruzan el Estrecho con cargamentos de droga.
El ministro también le ha expresado el deseo de incrementar los intercambios culturales a través de instituciones como el Instituto Cervantes y la Casa del Mediterráneo de Alicante.
Otro de los aspectos en los que ha hecho hincapié es el económico, con el fin de que haya más inversiones de empresas españolas.
Otmani ha garantizado que su país está empeñado en "eliminar todos los obstáculos" que han impedido una mayor presencia de compañías españolas en su país en los últimos años.
Con el propósito de ampliar la proyección de Marruecos en la escena internacional, García-Margallo ha invitado al país magrebí a participar en la Cumbre Iberoamericana de Cádiz de este año, al tener ya el estatus de observador.
La visita de Otmani, dos semanas después de la de Rajoy a Rabat, pretende ir generando confianza entre los dos nuevos gobiernos y preparar el terreno para que la cumbre bilateral prevista a final de año sea un éxito.
Prueba del trato privilegiado dispensado a Otmani, además de ser recibido en Zarzuela por el rey y por Rajoy, en la Moncloa, comenzó su visita reuniéndose con el presidente del Congreso, Jesús Posada.
Fuente: lainformacion.com
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