Espero que ni al este ni al oeste mis compatriotas, no malinterpreten lo que en estas líneas intento reflejar. Solo pretendo, realizar un análisis lo más objetivo posible desde mi visión de los acontecimientos. Con el fin de que pueda ayudarnos a todos a corregir errores y trasladar nuestra justa causa al mundo. Cuando cito medios de comunicación, me refiero estrictamente a los españoles, que son los que sigo y conozco, y por la implicación y responsabilidad del estado español en el sufrimiento del pueblo saharaui. Pero supongo, que con matices, la idea es extrapolable a otros países.
En realidad, el conflicto saharaui, nunca ha llamado la atención de los medios, tal y como corresponde a los medios de comunicación españoles, por diversas circunstancias que intentare desmenuzar.
Como punto de partida, tenemos la vecindad geográfica de España con el reino chantajista de Marruecos. Que aprovecha esta circunstancia como anillo al dedo, sus presiones y chantajes son infinitos. Aprovecha el más mínimo roce para sacar a relucir el tema del Sahara. Y desgraciadamente, los asuntos bilaterales entre Marruecos y España son innumerables, y donde España acaba cediendo siempre. Los más importantes son; inmigración, Ceuta y Melilla, la droga, intereses de empresas españolas, la pesca y un larguísimo etc.
La otra cuestión transcendental, es que en España casi no existen medios de comunicación independientes, todos sabemos que los medios pertenecen a 4 o 5 grupos editoriales que o están sujetos al gobierno de turno o a intereses empresariales muchas veces futuros, ficticios y nada concretos. Que el MAJZEN a través de la mano negra de su LOBBY, se encarga de vetar cualquier información veraz sobre el conflicto saharaui. Por lo que lo poco objetivo que sale, se debe a la insistencia de algunos profesionales o a algunos descuidos.
Por otro lado y como no puede ser de otra manera, está nuestra responsabilidad, que no es poca, y la forma en que manejamos nuestra política de comunicación y lo nefastos que somos para difundir tanto las buenas como las malas noticias.
Nunca ha habido una estrategia de comunicación transparente, veraz y oportuna. Nuestra información se ha basado siempre en lanzar globos con mensajes poco consistentes y exentos de un análisis profundo y ponderado.
Sin embargo, hasta GDEIM IZIK siempre habíamos encontrado alguna ventana por donde filtrar algunas noticias, análisis, comentarios en los medios de comunicación. Gdeim Izik, fue la bala que remato la aparición del conflicto en los medios de comunicación. Entre las intoxicaciones del Majzen (fotos de las niñas palestinas, fotos de la familia marroqui asesinada en Casablanca y un saco de bulos), y la información poco objetiva y rumores que venían de la población saharaui en las zonas ocupadas. Todo esto sumado a la mala gestión de la política informativa de los medios saharauis y de nuestros amigos. Le han regalado a los medios de comunicación la excusa perfecta para condenar la lucha del pueblo saharaui a la marginalidad.
Toda esta situación nos ha dejado en pañales ante un enemigo, el Majzen, infalible en el manejo de las artimañas, trucos, falsedades, victimismos y chantajes. Dirigidos a conseguir sus inmorales fines.
El Majzen, tiene el dudoso merito de hacer las mejores emboscadas tanto a sus amigos para neutralizarlos y chantajearlos. Como a sus enemigos para desacreditarlos, desprestigiarlos y despojarlos de la razón ante la opinión pública.
No seré yo quien reste merito a Gdeim Izik. Esta más que demostrado aunque algunos especialistas pretendan negarlo, fue el espejo en el que se miraron las mas que dudosas protestas posteriores, bautizadas como la Primavera Arabe, dudosas, porque son financiadas, alentadas, promovidas y dirigidas por las arcaicas y feudales dictaduras monárquicas del Golfo.
Gdeim Izik, fue para el binomio; Medios de Comunicación - Conflicto del Sahara, la puñalada mortal en la que el Majzen, utilizando su habitual guerra sucia salió airoso, y es doloroso para un saharaui reconocerlo.
Desde la visita guiada de dos periodistas de el Mundo y El Pais, elegidos y consentidos por el Majzen y la analfabeta funcional ministra de exteriores española, los días posteriores al desmantelamiento del Campamento. Se corrió un tupido velo en los medios de comunicación a todas las noticias procedentes del Sahara Ocupado.
Los términos de aquel acuerdo (visita guiada), no los sabemos y probablemente no los sabremos nunca, pero podemos intuir que a cambio de aquel montaje se bajaría el telón para siempre.
Pero nada justifica que los matones del Majzen lleven más de tres años, abusando, torturando y violando a mujeres y niños saharauis a diario sin que tenga un reflejo aunque sea minimo en ningún medio de Comunicación Español .
Lo que es más grave aún es el silencio de la clase política saharaui que trabaja para el MAJZEN. Uno puede entender que sean estómagos agradecidos con su amo. Pero es injustificable e indecente su silencio. Ver a esas mujeres con las caras ensangrentadas, que familiares cada día te informen de la detención durante la madrugada de un nuevo joven, que te digan que el terror y la intimidación por parte de los verdugos del Majzen es el pan de cada dia. Lo que convierte al Sahara ocupada en un lugar donde hacer una vida normal, se hace imposible. Todo ello hace que todos estos Saharauis-Majzenianos, no solo serán recordados por traidores, sino que también quedaran en la memoria de su pueblo como unos auténticos cobardes.
En el mundo actual, un teclado puede inundar la red de mentiras en cuestión de segundos, pero como es lógico, el recorrido de cualquier embuste es efímero. Por lo que conviene hilar una estrategia; fiable, creíble, seria y veraz que permita que salgan a la luz los padecimientos de nuestros compatriotas en las zonas ocupadas. No por bombardear con el más simple de los abusos que comete la mafia del Majzen, vamos a ganar la batalla. La batalla la ganaremos siendo más honrados, honestos, objetivos y dándole la importancia adecuada a cada noticia, que pretendamos que tenga la difusión que se merece, hay que separar entre una manifestación pacifica de 10 personas y otra de cuatro mil personas.
El número de noticias que generamos no tendrá valor ni eco en los medios de comunicación si no hay detrás una fuente solvente, veraz, exacta e independiente.
Solo así, podemos ganar el crédito perdido, y desnudar a un enemigo sin escrúpulos que utiliza todos los medios a su alcance, que no son pocos para armarse de una razón y una legitimidad, que ellos no tienen ni tendrán nunca.
La gran mentira, del gran embustero; El Majzen, solo se combate con la verdad y la razón, que son precisamente las bazas que nos sobran.
Abdelaziz Abdelkader Mahfud (abdema[at]yahoo.es)
Fuente: Libres Opiniones
Imprimir artículo
Si te ha gustado este artículo puedes compartirlo desde tu blog, página Web o foro.
Suscribete a los comentarios de este artículo
0 comentarios :
¿Que opinas de este articulo? Tus comentarios siempre serán bien recibidos, ¡¡ Gracias !!