Carta abierta al Gobierno Español
Madrid, España
El-Aauin, 11 de junio de 2016
Querido señor y señora,
El Sahara Occidental es un territorio no autónomo en conformidad con el artículo 73 de la Carta de la ONU, que Marruecos ocupó con total negligencia del derecho humanitario internacional, que desde 1960 ha hecho un llamamiento por el derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui. A pesar de la presencia marroquí en el Sahara Occidental y la administración de facto marroquí del territorio, España es un elemento clave en este conflicto que ha durado cuarenta años. España sigue siendo, como ex potencia colonial, que forma parte del Grupo de Amigos del Sahara Occidental, con Estados Unidos, Rusia, Francia y el Reino Unido. La opinión de España y su postura se escucha en este contexto y sobre todo a nivel de la UE y la ONU.
Es triste ver que España perdió muchas posibilidades para desbloquear el conflicto del Sahara Occidental y reconciliarse con una de sus páginas más oscuras de su diplomacia contemporánea en toda su historia. El gobierno español no alcanzó su presencia temporal en el Consejo de Seguridad de la ONU para dar un impulso decisivo a la resolución de este conflicto que duró más de 40 años. En primer lugar, la diplomacia española se ha mantenido en silencio, durante años ha apoyado la iniciativa marroquí de autonomía propuesto en 2007 para resolver el conflicto del Sahara Occidental. Esto no es ninguna novedad, ya que fue revelado en diferentes cables secretos publicados públicamente por el famoso WikiLeaks a finales de 2010. En 2013 los diplomáticos españoles estaban junto a los franceses para abortar la iniciativa de la Embajadora de los Estados Unidos ante la ONU, Susan Rice, que quería ampliar el mandato de la Misión de las Naciones Unidas para el Referéndum en el Sahara Occidental (MINURSO) para que incluyera la vigilancia de los derechos humanos en el Sahara Occidental bajo control marroquí y en los campamentos de refugiados saharauis suroeste de Argelia. Recientemente, España respaldaba a Marruecos en su crisis con el Secretario General de la ONU, e intervino en favor de Marruecos.
Por otra parte, la opinión pública española siempre ha tenido culpa y mala conciencia por el abandono del pueblo saharaui a merced de Marruecos. Algunos municipios locales y los gobiernos locales siempre han apoyado la causa saharaui y a los saharauis.
Más de 50.000 niños saharauis se benefician del programa “Vacaciones en Paz” donde pasan el verano en España acogidos por familias, también hay ciudadanos españoles ejecutivos elegidos de PP que, por ejemplo, han viajado al Sahara para mostrar su solidaridad y apoyo. Algunas ONGs españolas también han patrocinado muchos proyectos sociales en los campamentos, así como la organización de festivales y la sensibilización sobre el conflicto saharaui. Algunos van más allá y visitaron el Sahara Occidental bajo control marroquí. Todo esto muestra claramente una enorme brecha entre los políticos y la acción de la sociedad civil. La Hipocresía está profundamente arraigada en el sistema español. Los gobiernos españoles nunca han levantado su voz de protesta por la expulsión de las delegaciones, incluyendo parlamentarios, que querían ir al Sahara.
Recientemente, en diciembre de 2015, el Tribunal de Justicia Europeo emitió una resolución mediante la cual anuló el acuerdo de comercio entre la UE-Marruecos porque incluía el Sahara Occidental en contradicción con la ley internacional y las diferentes resoluciones de la ONU. En su fallo, el mencionado Protocolo de Acuerdo de Comercio no se había llevado a cabo sus deberes para asegurarse de que considera todos los aspectos del negocio, incluyendo su impacto en los derechos fundamentales del pueblo del Sahara Occidental y quién controla los recursos naturales de la región. tal decisión no debería tener un impacto inmediato en el comercio entre las dos partes, que ascendieron a cerca de 30 mil millones de € (el 32,8 $ millones de dólares) el año pasado.
El 19 de febrero de 2016 los servicios jurídicos del Consejo de Ministros de la Unión Europea han interpuesto un recurso contra la decisión del Tribunal de Justicia que dictaminó la anulación del acuerdo comercial entre la UE y Marruecos, firmado en 2012. España, Francia y Portugal y algunos de los Estados miembros de la UE va a intervenir en la audiencia que se espera tenga lugar. España será cómplice del régimen marroquí, ya que tiene la intención de intervenir en favor de la posición de Marruecos, junto con el Consejo Europeo, con el fin de convencer a la Corte a retractarse de su decisión. Las intervenciones se llevarán a cabo durante una audiencia, lo que probablemente va a tener lugar muy pronto. España sigue siendo la potencia administradora del territorio, como se estipula en la opinión legal emitida en 2002 por Hans Corell, antiguo consejero legal de los Asuntos Jurídicos de las Naciones Unidas y, por lo tanto, debería desempeñar un papel más activo para promover el derecho a la libre determinación en el Sahara occidental.
AMRPENWS señala que un acuerdo de este tipo es malo incluso para España. Hemos tomado nota de que el acuerdo comercial permitió a Marruecos aumentar el volumen de los productos marroquíes importados en la UE, de los tomates en particular. Se considera que es un duro golpe para la agricultura española, que es el principal exportador a los demás países de la UE. Por otra parte, los sindicatos agrícolas españoles insisten en que el acuerdo pondría 450.000 puestos de trabajo en riesgo en un país que ya tiene la tasa de desempleo más alta de Europa, alcanzando el 22,9 por ciento en diciembre de 2011. Mientras tanto, la temporada 2015/16 ha sido desastrosa para los productores de tomates en España y en la UE. En España, según datos del Ministerio de Agricultura, el precio medio en origen se ha situado en 0,50 € / kilo, con un mínimo histórico de 0,20 € / kilo, según datos del sector reportado por COAG. No hace falta decir que el historial de Marruecos en el respeto de los derechos humanos en el Sahara Occidental es muy sucio y es, de hecho, desastroso.
Incluso cuando Marruecos es visto como un socio estratégico clave y un punto de estabilidad digna de apoyo de la UE en una región de África volátil, la política, ofertas, y las asociaciones no pueden ser practicadas y firmadas a expensas de los derechos del pueblo del Sahara Occidental. Europa y España en particular, tienen que dejar la política de doble rasero, y, por lo tanto, cumplir con el derecho internacional. España tiene una obligación histórica hacia los saharauis a quienes ha abandonado y vendido a Marruecos en 1975 sin ningún respeto a su voluntad y sus aspiraciones. En general, es muy controvertido ver que la Unión Europea ganó el Nobel de la Paz en 2012, y está faltando el respeto e ignorando los derechos del pueblo del Sahara Occidental.
AMRPENS insta al Gobierno español a asumir sus responsabilidades históricas hacia el pueblo del Sáhara Occidental mediante la defensa de su causa y sus derechos a nivel del Tribunal de Justicia, la UE y la ONU. No hay espacio para la política de hipocresía y de doble moral.
AMRPENS saluda la independencia y la imparcialidad del sistema de justicia europeo. Tal sistema dejó en claro que los derechos del pueblo del Sáhara Occidental debe ser preservado y protegido. También pidió excluir en toda clase de acuerdo el Sahara Occidental.
AMRPENS insta a la UE a dejar de ignorar los derechos de los saharauis. La UE afirma que es promotora de los derechos humanos, si bien esta ayudando a Marruecos a legitimar su presencia en el Sahara Occidental, a expensas de los derechos de los saharauis y en contradicción con la ley internacional.
Firma,
Junta directiva
Asociación para el Control de Medios y para la Protección del Medio Ambiente en el Sahara Occidental. (AMRPENWS).
Fuente: sahararesources.org
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