Fuente: bubisher.org
Cada día, en la pequeña biblioteca de la wilaya de Auserd, la fiesta está garantizada. Porque leer es una fiesta, y en esa biblioteca se lee, ¡vaya si se lee! Y cada día de la lectura surgen, como de la chistera de un mago (una maga en este caso, llamada Gajmula) ideas para reflexionar sobre la vida, los sentimientos, el tiempo o el poder de la imaginación, por poner solo algunos ejemplos. Y después, los ojos expectantes de los lectores esperan impacientes la actividad que su bibliotecaria les ha preparado. Y siempre, siempre, se sorprenden, se divierten, participan, se van de la biblioteca deseando poder volver.
Esta semana los animales han sido los protagonistas, por ejemplo, “La Cebra Camila”, tan desobediente, generó un debate sobre los estados de ánimo. Y “El pequeño rey, director de orquesta” y sus bichitos haciendo, más que música, ruido, fueron un trampolín para que los niños perdieran la vergüenza y cantaran y bailaran con ganas. Y todo ello, eso sí, en español, porque a Gajmula le gusta que sus pequeños lectores practiquen, se esfuercen por entender y pierdan el miedo a hablar en esta su segunda lengua.
¡Bravo, Gajmula!
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