"Los refugiados del Sahara también merecen un reportaje"

Vista general del campo de desplazados saharauis Gdeim Izi, a 18 kilómetros de El Aaiún, capital del Sáhara Occidental

Admiro el periodismo de denuncia, el que remueve conciencias, aquel periodismo que incomoda a los estamentos poderosos, políticos, sociales, económicos, aquellos que viven en la impunidad. Jordi Évole nos incomoda en los sofás o sillones de nuestras casas de esta sociedad occidental que se idealiza en otras partes del mundo menos favorecidas. Nos cuenta los problemas que nos envuelven en su verdadera dimensión social. También expone que no los afrontamos con una coherencia solidaria, como es el caso de los refugiados.

Su último reportaje, titulado 'Astral', es una salvaje mirada a la hipocresía de los estados. En la propaganda que se ha hecho sobre el documental, en el mapa que se reproduce en la misma, hay un detalle que puede pasar inadvertido para la mayoría de personas que no están al día de las afrentas que sufre un pueblo que antaño fue colonizado por España y hoy esta invadido militarmente desde 1975 por Marruecos: el Sahara Occidental.

En dicho mapa no hay separación entre Marruecos y el Sahara Occidental, no existe ninguna delimitación fronteriza y lleva al equívoco de considerar al Sáhara Occidental como parte integrante de Marruecos. Desde hace 41 años hay una lucha por recuperar la dignidad y el territorio que pertenece a los saharauis, un pueblo refugiado que parece ser que esta olvidado y que merece un reportaje.

Por Rafael Martínez Buenaventura

Fuente: elperiodico.com

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