Jueila protegía a sus pequeños de los bombardeos escondiéndolos bajo un árbol. Su marido, pastor, había sido detenido y desaparecido por militares marroquíes en 1976. Tras cuarenta años guardando la esperanza de que estuviera en alguna prisión, un equipo español de forenses y psicólogos descubrió en 2013 sus restos en una fosa común. Las evidencias extraídas de esta exhumación forman parte del proceso que el juez Ruz ha abierto contra 11 mandos militares marroquíes por genocidio en el Sáhara. Jueila, adorada por sus hijos y nietos, ha caído en una depresión ante la certeza de que el esposo al que esperó toda una vida fue ejecutado. Su hijo Sidi, dentista gracias a una beca para estudiar en Cuba, ha construido una pequeña consulta en la que cobra precios irrisorios por atender a sus vecinos y vecinas.
En esta entrevista nos cuentan cómo han sido estos casi cuarenta años de búsqueda, de duelo inconcluso y de lucha por la supervivencia. Ahora sólo les queda la esperanza de que se haga justicia y se cumpla el derecho del pueblo saharaui a volver a su tierra.
Realización @patriciasimon
Imagen @nachocosio y @patriciasimon
Grafismo Marta Asolari
Música Jupiter the blue, Gillicuddy CC
Una producción de Médicos del Mundo Asturias
Fuente: Saharaui Si
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